27 de noviembre de 2022, fecha importante por un acontecimiento en la vida de la Congregación y de la Iglesia: la celebración oficial de la fusión de las Hermanas del Retiro Cristiano con nuestra Congregación, fusión reconocida oficialmente con el decreto del 8 de septiembre de 2022, en el Vaticano, por parte de la Congregación para los Institutos de vida consagrada y las Sociedades de vida apostólica.
La Eucaristía fue celebrada por el Padre Eric Poinsot, vicario general de la diócesis de Besançon, por el delegado Monseñor Jean Luc Bouilleret, acompañado de 2 sacerdotes, en la capilla de las Hermanas de Les Fontenelles, con una gran asamblea que incluía al menos 300 personas, entre ellas las Hermanas de Retiro, en número de 12 (incluidas dos hermanas que vinieron de Irlanda), Hna. María Rosa Muscarella, Superiora General de las Hermanas de la Caridad y Hna. María Luisa Caruso, Consejera General, Hna. Noëlle Portal, Superiora Provincial y su Consejo de Besançon, a quienes se unieron las Hermanas de la Caridad de Francia, Suiza, Inglaterra, representantes de varias Congregaciones de la diócesis y muchos feligreses de Les Fontenelles, Le Russey, familiares y amigos de las hermanas.
Cuando Juana Antida Thouret nació el 27 de noviembre de 1765, Antoine-Sylvestre Receveur, el fundador de las Hermanas y Hermanos del Retiro Cristiano, era un muchacho de 15 años. Él también era hijo de esta región de Franca Contea.

Antoine y Juana Antida tuvieron la oportunidad de encontrarse a lo largo de sus vidas, quizás en Les Fontenelles, lugar donde se fundó el Retiro cristiano en 1789, pero sobre todo en los caminos del exilio, en Suiza, particularmente en Le Vègre. Luego sus caminos se separaron, pero ambos permanecieron apasionados por el Evangelio y la misión hasta el final.

Al inicio de la celebración, sor Rose Marie Prongue, hasta entonces Superiora General de la Congregación del Retiro Cristiano, después de recordar todo el camino vivido con sus hermanas antes y después de la petición oficial de fusión dirigida a sor Nunzia De Gori , ex superiora general, en octubre de 2019, seguida de varios encuentros con la Congregación de las Hermanas de la Caridad, dijo: «Gracias por la acogida tan fraterna y cordial que me han brindado… un agradecimiento especial a Sor Nunzia y su Consejo general , a Hna. Noëlle y su Consejo Provincial y a Hna. Rosa y su Consejo. Habéis mostrado un interés sincero y sensible por la situación de fragilidad y envejecimiento de nuestra pequeña Congregación internacional.

Es con nuestro pasado, con nuestra tradición al servicio de Cristo, al servicio de los jóvenes y de las personas en busca de sentido, que hemos elegido convertirnos en Hermanas de la Caridad para vivir con vosotras nuestra consagración a Dios y compartir la misma misión en la Iglesia y en el mundo. Damos gracias al Señor de la historia que, a través de su Providencia, guía nuestros pasos al servicio de los pobres, siguiendo las huellas de nuestros fundadores y su inspiración”.

Nuestra actual superiora general, Sor María Rosa Muscarella respondió: «Estoy feliz de estar aquí con vosotras para vivir este momento en el que las Hermanas del Retiro Cristiano y las Hermanas de la Caridad de Santa Juana Antida Thouret se convierten en una sola familia al servicio de los pobres y de la Iglesia… Sabemos lo importante que fue para Santa Juana Antida y su hermana Juana Bárbara el tiempo que pasó con los Solitarios. Como solitaria, Juana Antida enriqueció su espiritualidad… la experiencia vivida forma parte del patrimonio carismático de nuestra Congregación. Vuestra venida con nosotras es una gracia que el Señor nos ofrece.
Con la riqueza espiritual de nuestras Congregaciones, pedimos a Santa Juana Antida y al Venerable Padre que nos den la oportunidad de vivir esta experiencia. Pedimos a Antida y al Venerable Padre Antoine Sylvestre Receveur que nos ayuden a caminar juntas con confianza para seguir alimentando y esparciendo el fuego de la caridad que Cristo encendió en la tierra».

Después de la homilía, todas las hermanas presentes renovaron juntas sus votos y luego las hermanas del Retiro recibieron la Cruz y la Regla de Vida de las Hermanas de la Caridad.

La procesión del Ofertorio tuvo lugar con la ofrenda de pan y vino. Al pie del altar se colocaron dos cuadros que enmarcaban los rostros del Padre Receveur y de Juana Antida con las inscripciones que los identificaban: «Solo Dios basta» y «Tu amor, Señor, me basta».

Un nutrido coro ayudó a la Asamblea a orar y dar gracias. Los numerosos aplausos expresaron la fraternidad compartida y el fervor de la oración, marcada también por tanta emoción.
Después de la celebración eucarística, muchas personas se reunieron nuevamente para tomar un aperitivo que permitió el encuentro y el compartir, mientras que la comida reunió a 220 personas que disfrutaron de este momento de convivencia.
El mismo día, en BENIN, una celebración marcó la fusión de tres hermanas del Retiro con sor Maria Paola Neloumta, superiora provincial de la Provincia de África.
El lunes 28 de noviembre, en Saint Ferjeux de BESANCON, una celebración selló la entrada en nuestra Congregación de otras 4 hermanas de la Provincia de África, nuevamente acogidas por Sor María Rosa y Sor María Luisa.
En este inicio del Adviento cristiano nos quedamos con estas palabras de saludo del Vicario General: «En las luchas de esta vida, el Señor haga firme vuestra fe, gozosa vuestra esperanza, eficaz vuestra caridad».

Qui sont les Soeurs de la Retraite Chrétienne?

Les Sœurs de la retraite chrétienne forment une congrégation religieuse féminine de droit pontifical dont le but est l’approfondissement de la foi chrétienne au moyen de retraites spirituelles et de l’Adoration eucharistique.

Historique

En 1787, le Père Antoine-Sylvestre Receveur (1750-1804) donne un règlement de vie à une douzaine de jeunes filles pour faire l’école aux petites filles et organiser des retraites spirituelles. En 1789, il fait construire une maison pour cela, qui ouvre le 19 septembre 1789 aux Fontenelles. Le 1er février 1791, Mgr de Durfort, archevêque de Besançon approuve le nouvel institut. Elles prennent l’habit religieux le Vendredi saint 1792, et le nom de Solitaires de la retraite chrétienne, mais sans prononcer de vœux religieux. Le 23 octobre 1792, les révolutionnaires envahissent la maison des sœurs qui doivent s’exiler en Suisse.

En 1803, Mgr de Cicé, archevêque d’Aix, les accueille dans son diocèse et fonde deux maisons à Marseille et deux autres à Aix-en-Provence, une des maisons d’Aix est destinée à l’enseignement des garçons et à préparer des prêtres. Cette école a ainsi accueilli saint Laurent Imbert, évêque martyr en Corée, saint Étienne-Théodore Cuenot, évêque martyr au Vietnam, et Mgr Jean-Joseph Ferréol, considéré en Corée du Sud comme un des fondateurs de l’Église catholique de ce pays.

La société reçoit le décret de louange le 29 septembre 1851. Sous la domination d’Antonietta Frèze, première Supérieure générale de l’institut, il y a un développement notable de la congrégation en Angleterre, alors que presque toutes les communautés en France sont dissoutes par les lois anti-congrégation ; certaines communautés déménagant en Suisse et en Belgique.

Le 23 août 1912, le Saint-Siège approuve les Sœurs de la retraite comme société exclusivement féminine ; dans le chapitre général de 1921, il est décidé d’émettre des vœux pour les religieuses, et le 12 mars 1929, la Congrégation pour les instituts de vie consacrée et les sociétés de vie apostolique approuve l’institut comme congrégation religieuse.

Activités et diffusion

Les sœurs se consacrent aux retraites spirituelles et à l’adoration eucharistique. Elles sont présentes en France, en Irlande, au Royaume-Uni, en Suisse, au Bénin. La maison-mère est aux Fontenelles. En 2017, la congrégation comptait 42 sœurs dans 7 maisons.