La escuela como cuerpo de esperanza para cambiar el mundo
El congreso de la OIEC (Oficina Internacional de Educación Católica) se celebró en Marsella del 1 al 3 de diciembre de 2022. La hermana Mirna Farah participó activamente, coordinando dos mesas redondas sobre el tema «Educación para la fraternidad universal en un contexto multirreligioso».
He aquí un balance de este acontecimiento eclesial, mundial y educativo por excelencia.
En la histórica, cosmopolita y mediterránea ciudad de Marsella, precisamente en el Palais du Pharo, tuvo lugar el XXI Congreso Mundial de la OIEC, con representantes de escuelas católicas de todo el mundo.
El objetivo del evento fue afirmar nuestra esperanza educativa, reflexionar juntos sobre diferentes temas educativos, presentar diferentes testimonios en el campo de la innovación educativa, haciendo hincapié en la necesidad de continuar la declinación y la integración del Pacto Educativo Mundial.
Durante la ceremonia de apertura, se transmitió el mensaje que el Papa Francisco dirigió a los delegados. Recordó que la educación no es simplemente una empresa humana: «Por eso, cuando nos acercamos a la educación, no podemos hacerlo pensando en algo puramente humano, centrándonos en programas, formación, recursos, espacios de acogida«, porque como cristianos, la vocación educativa nos pide dar voz «a una Palabra que no es la nuestra, que nos supera, que nos trasciende«. Así pues, la educación es y sigue siendo un «acto de esperanza» en una sociedad líquida, ideológica y socialmente fragmentada.
Durante los tres días del Congreso se siguió reflexionando sobre diversos temas: «Dar esperanza al mundo», «La OIEC se compromete con el Pacto Mundial por la Educación», «El sentido de una escuela católica en un país musulmán», «Reparar juntos el tejido desgarrado del mundo», «Educación para la fraternidad universal en un contexto multirreligioso».
La última velada concluyó con una cena para celebrar el 70 aniversario de la OIEC, ofrecida por un joven libanés antiguo alumno del colegio de las Hermanas de la Caridad Sainte Anne de Beirut. Cantó en cuatro idiomas y despertó la admiración de personalidades asistentes como monseñor Paul Tighe, Secretario del Dicasterio para la Cultura y la Educación (Sección de Cultura), y el cineasta Evgeny Afineevsky, que realizó un documental sobre el Papa Francisco en 2020.
Puede seguir los trabajos del Congreso en streaming haciendo clic aquí.
Lo que me impactó personalmente fue el llamamiento a «derribar muros», a «dar sentido a la vida», para que la escuela católica siga siendo un «laboratorio de vida y fraternidad universal».
Hermana Mirna Farah
SdC
