Del 4 al 14 de febrero de 2025, la Hermana Wandamaria y la Hermana Mirna viajaron a Egipto para continuar su proceso de escucha y conocimiento de las realidades educativas de la Congregación.

Fue una oportunidad única para descubrir las múltiples facetas de nuestras instituciones, intercambiar con los consejos de dirección, los estudiantes, los equipos pastorales, así como conocer a las antiguas alumnas de nuestras escuelas.

Después de participar en el coloquio organizado por la Obra de Oriente, que reunió a 400 actores educativos de Oriente Medio para reflexionar sobre el tema «Transmitir en tiempos de crisis», en el teatro de la escuela Lassallienne de El Cairo, participamos en la reunión de directoras de nuestras escuelas en Líbano y Egipto. El objetivo de esta reunión, organizada por el Consejo Provincial, era reforzar la colaboración entre los distintos centros de la provincia. Participamos en la reflexión sobre las Líneas Educativas, dirigimos una formación sobre «El estilo educativo de Juana Antida, entre ayer y hoy» y debatimos sobre la modalidad de acción de la red International Thouret y la misión de la Oficina Internacional para la Educación (UIPE).

Al final de estos días de reflexión, comenzamos la visita a nuestras dos grandes instituciones en El Cairo y Alejandría. Desafortunadamente, no pudimos ir a Nag Hamadé, donde tenemos una escuela infantil, una guardería y un centro de acogida para niños con discapacidad. Sin embargo, la entrevista con la hermana Manale, la directora, nos permitió descubrir la riqueza, la grandeza y la utilidad pública de esta escuela (la única escuela católica en la gobernación).

En El Cairo o en Alejandría, las alumnas nos recibieron con cantos, poemas y palabras que dejan entrever el clima de fraternidad y respeto que reina a pesar de que hay alumnas musulmanas, coptas ortodoxas o coptas católicas. Las reuniones que mantuvimos con el Consejo de Dirección, con los responsables académicos, con el equipo pastoral y con las unidades de desarrollo didáctico nos permitieron comprender los problemas específicos y los principales desafíos, sobre todo después de una serie de leyes decretadas recientemente por el Ministerio de Educación.

El compromiso de los equipos directivos con el éxito escolar y el bienestar de los alumnos fue palpable. Hacen hincapié en la educación inclusiva y en la formación continua de los profesores, e introducen numerosas iniciativas para garantizar un entorno escolar armonioso y estimulante.

Las reuniones con los alumnos fueron especialmente inspiradoras: estos jóvenes apasionados, curiosos, francófonos y motivados tienen grandes ambiciones. Casi todos expresaron su reconocimiento y apego a su escuela. Desean reunirse e intercambiar ideas con alumnos de otras escuelas de la red Thouret.

Otro punto culminante de la visita fue el Centro del Amor en Alejandría, una escuela inclusiva que acoge a 47 niños que padecen diversos síndromes o discapacidades. Además de los logros humanos y técnicos, destacamos la calidad humana y relacional que caracteriza a los educadores y que refleja la intención educativa de nuestra fundadora: «Se educa con el corazón».

Los breves encuentros con las antiguas alumnas de Alejandría y El Cairo fueron especialmente emotivos. Estas antiguas alumnas hablaron del impacto que la formación recibida en sus instituciones tuvo en su vida profesional y personal, y destacaron la importancia de la educación recibida y de los valores cultivados a lo largo de su trayectoria escolar. Varias repitieron que «la escuela es mi segunda familia».

En la tierra de los faraones, el carisma de la caridad está muy presente desde hace unos cien años. Nuestras hermanas siguen sembrando con valentía las semillas de la tolerancia, la solidaridad y la caridad para que la fuerza y la cohesión sean el signo distintivo de la gran familia educativa de Jeanne-Antide en Egipto.