Sor Tina, que asistió a la JMJ junto con jóvenes de Albania, nos habla de su parada en Fátima.
Lunes 7 de Agosto
«Ayer por la tarde llegamos a Fátima, que será la última parada en compañía de los jóvenes de nuestra archidiócesis de Durres. Es un gran regalo poder concluir esta peregrinación en el Santuario de Nuestra Señora de Fátima. María nos ha acompañado y llevado de la mano durante estos días y, como dijo el Papa, –Ella nos señala a su Hijo Jesús-«.
El propio Papa Francisco había decidido, antes de partir para Portugal, confiar a María los jóvenes participantes en la JMJ 2023.
La Vigilia y la Misa retomaron también el tema mariano. El Pontífice explicó a los jóvenes el significado del gesto de María, que para llegar hasta su prima «Se levantó y se fue deprisa» a pesar de que acababa de recibir el anuncio del ángel. La Virgen, «en vez de pensar en Ella, pensó en la otra», en su prima Isabel. La alegría es misionera». Por tanto, he aquí la invitación a ser peregrinos y misioneros alegres.
También el Papa, durante la audiencia de Fátima del 5 de agosto, dijo: «Hay muchas invocaciones dirigidas a María, pero hay una que podemos pronunciar también pensando en la Visitación: la Virgen que corre. Cada vez que hay un problema, cada vez que la invocamos, Ella no tarda. Ella llega. Se da prisa. Virgen que corre, ¿te gusta? Digámoslo todos juntos. La Virgen tiene prisa. Tiene prisa porque es una madre -Apressada-«.
Fátima se reconfirma, gracias a esta JMJ, como lugar de búsqueda, sobre todo de paz: «Por eso, durante la JMJ, he vuelto a Fátima, al lugar de la aparición, y junto con algunos jóvenes enfermos he rezado para que Dios cure al mundo de las enfermedades del alma». El Papa citó cuatro de ellas: «el orgullo, la mentira, la enemistad, la violencia». A continuación, el Papa Francisco renovó la consagración de Europa y del mundo al Corazón Inmaculado de María.