En la Misa de Apertura de la JMJ 2023, el Patriarca de Lisboa, Cardenal Manuel Clemente: «Cada uno de nuestros encuentros debe abrirse con un saludo auténtico, en el que intercambiemos palabras de acogida sincera y de plena participación».
La JMJ es una experiencia única de la Iglesia universal. También este año -confirma el Comité Organizador- los jóvenes llegados de todos los rincones del mundo se saludan, se abrazan, como si se conocieran de toda la vida. Y en su saludo está la chispa de un mundo nuevo.
«Aprendamos con María a saludar a todos y a cada uno -continúa el Patriarca- y pongámoslo en práctica asiduamente durante esta Jornada Mundial de la Juventud. El mundo nuevo comienza con la novedad de cada encuentro y la sinceridad del saludo que intercambiamos. Ser personas entre las personas, visitándonos constantemente unos a otros».
En la época histórica que vivimos, marcada por guerras, crisis de ira, pretensiones de dominación, encontrarse y saludarse entre jóvenes de todo el planeta es una promesa mutua de que «ha merecido la pena el esfuerzo de emprender este viaje que os ha traído hasta aquí para encontraros, en estos días, en la diversidad y las cualidades personales que cada uno de vosotros aporta, desde todas las tierras, lenguas y culturas. No hay nada como este viaje personal y de grupo para encontrarse con el viaje de cada uno«.
La próxima cita es el 3 de agosto a las 18 horas, de nuevo en el Parque Eduardo VII para el encuentro entre los jóvenes y el Papa: un acto de carácter festivo y de encuentro, en la dimensión de la oración.
