Hola familia primero quiero presentarme, mi nombre es Carlos Ramón Arévalos González, vivo en Fernando de la Mora, Zona Sur, Fernando de la Mora, Paraguay.

Soy catequista del área de Confirmación, mi comunidad es San Francisco de Asís y desde el año 2017 me enamoré de Santa Juana Antida, como yo la llamo “mamá Juanita”, trato de seguir su ejemplo, el servicio, la misión de ayudar y servir con amor y alegría a los que más necesitan y también acompañando y guiando a los jóvenes como guía en las actividades y los encuentros en Búsqueda del Tesoro y adolescentes que son los tesoritos de Santa Juana Antida.

Desde el año que conocí a mamá Juanita, también me hice amigo-misionero de las familias y amigos de Santa Juana Antida Thouret y he participado en varias misiones y sobre todo en los novenarios que me hacen enamorar cada vez más de mi mamá Juanita. Este año estamos viviendo de una manera muy diferente y especial por la pandemia que nos hace permanecer en nuestras casas y desde nuestras casas, con la familia, vivir, compartir y rezar la novena, en mi casa, rezo con mi mama Eva.

Todos los días por la mañana temprano, preparamos un pequeño altar con las imágenes de Jesús y de Santa Juana Antida y de nuestra patrona, que es la Virgen de Caacupé, cada día vamos colocando un signo que caracteriza a Santa Juana Antida.

El primer día ha sido la sandalia que simboliza el ser misionero, el segundo día ha sido la olla y algunos alimentos haciendo memoria del inicio de la misión de SJATh, el tercer día la Cruz, presentando a los crucificados del mundo globalizado de hoy, el cuarto día la sal y una lámpara significando que todos somos sal y luz para el mundo, rezando por los amigos-familias de SJATh, quinto día colocamos un reloj signo del tiempo de Dios en nuestras vidas, en el sexto día hicimos un corazón, ese corazón simboliza la llama de la caridad la cual debe arder cada día más, rezando por el don de las vocaciones , en el séptimo día una barca imagen de la Iglesia, en el octavo día la imagen de María, madre de Jesús y Madre nuestra, acogiendo la invitación de Juana Antida de tener una sólida devoción a María. El último día del novenario de nuestra Santa Patrona hemos dado gracias por el don que es SJATh para el mundo y para cada uno de nosotros.

Cada signo nos ayudó a recorrer el camino del novenario, conociendo más a Juana Antida.

El sábado 23 de mayo, fiesta litúrgica de SJATh, ha sido muy significativo, hemos estado sirviendo a los más pobres y necesitados, a través de tres ollas populares con alegría y tanta felicidad.

Muy contento me he sentido en todo este tiempo que nos ha ayudado a ser y estar más cerca de nuestros hermanos y hermanas más necesitados por medio de la llama de la caridad de Santa Juana Antida.

Me despido muy agradecido a Dios y a Santa Juana Antida por todo lo vivido y por lo que seguiré viviendo.

Carlos Ramón Arévalo G.