Hacia las energías renovables en la escuela Jeanne-Antide de Kfour : desde que la crisis económica golpeó al Líbano, los ciudadanos sufren una drástica reducción de la electricidad. Se trata de un problema que afecta a todos los libaneses sin excepción, y que está perjudicando su salud moral y psicológica.
Enfrentada a diario a cortes de electricidad que paralizan nuestra vida escolar (sin Internet, imposibilidad de utilizar las pizarras activas o los retroproyectores, imposibilidad de cargar los ordenadores portátiles o de realizar experimentos en el laboratorio, etc.), nuestra comunidad educativa rechazó la posibilidad de abonarse a un generador, que asegura el suministro de electricidad pero aumenta la contaminación atmosférica y el riesgo de enfermedades respiratorias y cancerígenas debido a sus emisiones de dióxido de carbono; ¡optó por nuestro planeta!
Tras varios viajes, finalmente empezó a instalar paneles fotovoltaicos. Esta transición ecológica ha reducido nuestra dependencia del fuel y ha abaratado costes. Así que hay muchos beneficios tangibles, como el ahorro de energía y la preservación de la naturaleza. Nuestros alumnos, conscientes de la importancia de los recursos naturales, están desempeñando un papel crucial en este cambio.
Gracias a ello, comprenden la importancia de esta energía solar natural y no contaminante y gestionan su consumo de electricidad de forma responsable, gastando menos (desconectando los aparatos utilizados durante las clases, apagando todas las luces antes de salir de clase, etc.).
Nos alegramos de haber hecho juntos esta transición ecológica, aunque casi nos hayamos visto obligados a tomar esta decisión. Sin embargo, ahora es importante crear una nueva cultura ecológica e integrar en nuestras prácticas acciones concretas para salvar a la Madre Tierra.
Marianna M.