La edad legal para el matrimonio cristiano a los 18 años es un paso adelante para proteger a las niñas y abandonar los matrimonios precoces, afirma Kamran Michael, político cristiano y ex senador, que en los últimos años ha promovido ante las instituciones la protección de los derechos de los menores y de las personas más vulnerables, entrevistado por la Agencia Fides..
El 9 de julio, con una medida que obtuvo una amplia aprobación tanto en la comunidad política como en la eclesiástica de Pakistán, la Asamblea Nacional de este país elevó a 18 años la edad legal para contraer matrimonio de los chicos y chicas pertenecientes a la comunidad cristiana, con lo que las disposiciones sobre el matrimonio cristiano se ajustan a las normas paquistaníes de protección de menores.
El proyecto de ley titulado «Ley de Enmienda del Matrimonio Cristiano de 2024» fue presentado por un miembro cristiano de la Asamblea Nacional, Naveed Amir Jeeva, con el objetivo de actualizar la Ley de Matrimonio Cristiano de 1872, que anteriormente fijaba la edad para contraer matrimonio en 16 años para los chicos y 13 para las chicas. Fue el político cristiano Kamran Michael, senador en la pasada legislatura, quien propuso por primera vez la enmienda en el Senado en enero de 2023, señalando que elevar la edad del matrimonio era esencial para proteger a las niñas de los abusos sexuales y las conversiones forzadas.
«El Estado tiene el deber de proteger a los niños de la explotación y de defender sus derechos», ha señalado, expresando su satisfacción por la aprobación de la ley, que, tras ser aprobada por ambas cámaras (el Senado la había aprobado en febrero de 2024), espera ahora la firma del presidente para convertirse en ley plena y entrar en vigor. La modificación de la ley tiene también por objeto garantizar la protección de los derechos fundamentales de los niños, en particular el derecho a la educación y a la salud, ha remarcado, congratulándose por la aprobación de las Iglesias de todas las confesiones de Pakistán.
«La enmienda ayudará a prevenir los matrimonios forzados de chicas cristianas menores de edad», ha declarado con satisfacción el obispo Azad Marshall, presidente de la Iglesia Anglicana de Pakistán y del Consejo Nacional de Iglesias de Pakistán. «El avance es significativo porque allana el camino para posibles acciones en cuestiones relacionadas, como las conversiones forzadas de niñas menores de edad y el uso indebido de las leyes sobre la blasfemia», ha añadido, haciendo un llamamiento a todas las Iglesias cristianas de la nación para que creen un grupo conjunto que informe al Parlamento sobre cuestiones importantes para la vida y la seguridad de las comunidades confesionales cristianas de la nación.
La Conferencia Episcopal Católica de Pakistán, a través de su Comisión Nacional de Justicia y Paz (NCJP), ha celebrado también la enmienda: El obispo Samson Shukardin, Director Nacional de la Comisión, y el padre Bernard Emmanuel, Director Ejecutivo, expresando su «sincero agradecimiento a todo el Parlamento», han declarado que «se trata de una reivindicación histórica de la comunidad cristiana», y es una «disposición crucial para proteger a nuestras niñas menores de edad», esperando que «el gobierno tome nuevas medidas para criminalizar las conversiones religiosas forzadas», con el fin de proteger a los ciudadanos no musulmanes, como las comunidades hindú y cristiana, que se enfrentan a problemas en este sentido. El fenómeno, de hecho, está relacionado con el del secuestro y las conversiones forzosas de niñas cristianas e hindúes al Islam, ya que la sharia (ley islámica) permite considerar «adultas» a las niñas que alcanzan la pubertad, y por tanto la posible edad del matrimonio.
El pasado mes de abril, un equipo de expertos de las Naciones Unidas pidió a Pakistán que aprobara una legislación para proteger la vulnerabilidad de las mujeres y niñas pertenecientes a confesiones minoritarias, especialmente en lo que respecta a los matrimonios forzados y las conversiones religiosas forzadas, solicitando a Pakistán que elevara la edad legal para el matrimonio de las niñas a los 18 años, como medida disuasoria. Los expertos señalaron que los matrimonios forzados y las conversiones religiosas de niñas pertenecientes a confesiones minoritarias han sido «validados por los tribunales», pero «los matrimonios infantiles, precoces y forzados no pueden justificarse por motivos religiosos o culturales», subrayando la necesidad de disposiciones «destinadas a invalidar, anular o disolver los matrimonios contraídos bajo coacción».
El grupo de trabajo de la ONU estaba formado por la relatora especial sobre libertad de religión y creencias, Nazila Ghanea; el relator especial sobre cuestiones de las minorías, Nicolas Levrat; la relatora especial sobre trata de seres humanos, Siobhan Mullally; y el relator especial sobre formas contemporáneas de esclavitud, Tomoya Obokata.
Según datos de organizaciones de la sociedad civil, alrededor de 1.000 niñas menores de edad cristianas o hindúes son secuestradas cada año en Pakistán, convertidas a la fuerza y casadas con sus secuestradores.
(PA) (Agencia Fides 19/7/2024)